miércoles, 4 de febrero de 2015

HACIA EL CIELO


Caminando tranquilamente, mirando al horizonte, y poco a poco el cielo se va tornando gris, hace viento... sabemos que va a llover.

Corremos para encontrar refugio y tomar algo caliente, pues el clima se ha enfriado al punto de enfriarnos también nosotros.

De un momento a otro se desata el aguacero y estamos felices de no habernos mojado. Truena seguramente, y al cabo de 20  minutos (en ocasiones más) ya ha pasado el aguacero.

Hagamos una similitud con nuestras vidas; cuando se avecina la tormenta corremos hacia cualquier dirección que nos pueda ofrecer una solución y que una palmadita en la espalda nos diga que en 20 minutos todo va a pasar...

En ocasiones puede ser así de fácil; en otras no tanto. Debemos enfrentar la tormenta con todo su inclemencia, y a veces no encontramos donde  guarecernos, a veces no encontramos palabras de aliento en las personas a nuestro alrededor.

Pero ten confianza, pues a pesar de la fuerte lluvia esta ha de pasar, y con la mirada esperanzadora del mañana, el día volverá a brillar en toda su plenitud,y tú volverás a disfrutar del paisaje en su totalidad, sabiendo que formas parte de Él, pues sin tí no sería lo mismo.

Solo debes resistir, buscar posibles soluciones, ejecutar la que  te parezca mejor y esperarás los resultados. Todo va estar bien. Sigue adelante, y recuerda que nada es para siempre y todo siempre pasa. 

Contigo,

Flor